En el mundo ideal de las grandes marcas hay un equipo detrás del lanzamiento de cada producto que sale a la venta en los supermercados, un equipo que se encarga de recabar información y realizar diversas pruebas que pueda garantizar en el éxito de ese producto y en caso de ser necesario postergar la salida al público, tal y como actuó en su momento Procter & Gamble quienes retrasaron el lanzamiento en México de una de sus lineas de jabones líquidos corporales debido a que no hacía suficiente espuma ya que durante las pruebas del producto, el equipo de marketing se percató que en nuestro país se tiene la creencia de que entre más espuma haga el jabón más eficaz será la limpieza.
Puede que no cuentes con los recursos de las grandes marcas, sin embargo esa no es excusa para lanzar productos al mercado con la esperanza de solo probar y ver si funcionan o solo porque a ti te parece que es una buena idea, pero ¿Hasta que grado puede afectar a tu negocio hacerte oídos sordos de tus clientes?
Para contestar esta pregunta tengo en mente dos grandes ejemplos que son recientes y que ilustran lo importante de conocer y saber escuchar a tus consumidores, el primero es el éxito de la campaña del Gobernador electo de Nuevo León: el senador Samuel García; que haya salido victorioso en la contienda electoral, no solo es consecuencia del apoyo recibido por su esposa, la influencer Mariana Rodríguez, sino que, su equipo de campaña supo llevar el mensaje correcto a la audiencia adecuada, apostaron por el grueso de la población: los millennials, si, esos jóvenes adultos ansiosos por hacer historia haciendo las cosas diferentes. El equipo de campaña de Samuel García, le hablo a su público en su idioma, a través de los canales de comunicación que ellos frecuentan, y con el discurso de «Sacar a la vieja política», supieron personalizar su producto y hacer que los votantes de verdad se sintieran identificados con ellos: Personas que todos los días se levantan a trabajar y dar lo mejor de si para elevar su calidad de vida.
El segundo ejemplo es Anna Sarelly Cornejo, la influencer y videoblogger es un claro ejemplo de lo que no debes hacer al lanzar un producto o servicio al mercado. La regiomontana causo controversia entre sus seguidores por el lanzamiento de su línea de bolsas, las cuales rondan entre los $5,000 y $5,800, estos precios se salen completamente de su segmento de mercado, pese a que suele compartir un estilo de vida de lujo, de acuerdo a datos proporcionados por Scan Audiencie la mayoría de sus seguidores son jóvenes de 18 a 24 años con ingresos que nos les permiten hacerse de una de sus bolsas, inclusive sus mismos seguidores le hicieron saber a Anna Sarelly que sus bolsas estaban fuera de su presupuesto y con esto, este lanzamiento se sumó a la lista de fracasos de la influencer.
Como puedes ver, definir a tu publico y conocerlos es el factor que puede determinar el éxito o fracaso de tu negocio. Si te ha gustado este artículo y quieres saber más acerca de cómo puedes conocer mejor a tus clientes suscríbete a nuestro newsletter.